En principio es importante subrayar que actualmente no existe una prueba única que diagnostique un TDAH.
Para obtener un buen diagnostico se debieran realizar dos tipos de pruebas: Médicas y clínicas
Pruebas médicas
Se debieran realizar unas pruebas médicas para descartar otras patologías: Analíticas de sangre y orina, Medida de la tensión arterial, pruebas de audición y visión, etc. Además los profesionales de Neuropediatría y Neurología suelen pedir un encefalograma y/o escáner cerebral, no como pruebas determinantes de diagnóstico de TDAH, sino para descartar otras posibles patologías como ausencias, epilepsia, etc.
Pruebas clínicas
El profesional debiera realizar las siguientes pruebas psicodiagnósticas: